Así que… has vuelto a picar… ¿no? ¿Está vez no? Pues quizá deberías… ya que ha vuelto, dos semanas después de su manual básico, el juego de rol epicodecandente (y postchorrapunk) por excelencia.
Déjà vu
Hubo un época en el mundo en la que existieron dinosaurios. Si, ya sabes, esos de nombre raros como Dilophosaurus, Spinosaurus, Tyrannosaurus, Cobi o Curro. En esa época, aparte de que todo esto era campo, había menos juegos de rol que ahora (así, a ojo, un kilopondio menos). Y, entre ellos, estaba nuestro interfecto (esta no es más que otra de esas palabras grandilocuentes que, en verdad, sólo tienen significado si usas la segunda definición de la RAE).
En esa época, en que internet era tan precaria que todavía no tenia el prefijo inter, Fanhunter, ya lo hemos dicho, deslumbraba por la cantidad de fans que publicaban sus historias propias demostrando, como si del gato de Schrödinger se tratara, que al mismo tiempo cualquiera y nadie podía escribir sobre Fanhunter. ¿Cómo? Te lo explico en el siguiente párrafo.
Sí, éste (mmmm… el olor a chiste clásico de Fanhunter). Fanhunter siempre ha brillado en el humor local. Pero ni siquiera local en referencia a tu ciudad si no local hablando del lugar dónde jugabais, sea casa de tus padres o el bar del pueblo, y el grupo concreto. Esto provoca que tu mejor aventura de Fanhunter, seguro, ni siquiera ocupa una línea en una servilleta. Diría que sólo está en tu cabeza pero, francamente, eso suena peor.
Sin embargo Chema, Cels y demás comparsa tienen que vivir de algo así, durante años, os han engañado como chinos. Así aparece Dos Semanas después: un libro con 4 aventuras cortas que nos traen todo lo que necesitas: Macutes, disparos, pichurrina y ese regusto a los años 80-90.
Así vamos a pasearnos por este libro. Y, para que se diviertan les dejamos con dos concursos:
- Adivinen la edad de cada autor por sus referencias
- Descubran la errata que hay oculta en esta publicación.
Amanecer macute, que no es poco
Referencias en el título – Amanecer rojo (la de 1984 o la de 2012) y Amanece que no es poco.
Opinión – Una exquisitez que sólo puede que necesite algo de sal y pimienta al gusto de la casa.
Zonk-PJ ha creado lo que, a mis ojos, es un clásico instantáneo de Fanhunter. Tiene todo lo que ha de tener para conectar conmigo y decir «juguemos esto ya, por favor». Me encantan su toque rural, amo sus referencias y pienso poner a las Hermanas de Batalla Mañas en absolutamente todas las partidas (o, al menos, hasta que dejen de tener gracia).
Que, si te pones exquisito (si ti pinis ixquisiti) no deja de ser un «ves de A a B» pero, ya vimos en Mad Max: Fury Road a lo que nos puede llevar eso.
Es difícil mejorar esta obra de arte pero, quizá, si tienes algo de tiempo yo haría que Fora fuese el pueblo de Amanece que no es poco. Y... ¿quizá un toque Mad Max en la road movie?... nunca sobra un homenaje a Mad Max. Por cierto... si eres vieja guardia y te has jugado En un lugar de la mancha del X-Pasión Kit sólo te diré: los macutes de esta aventura SÍ tienen órdenes. Tú ya me entiendes.
La tumba de los gorrones
Referencias en el título – La tumba de los horrores (infame aventura de D&D famosa por ser una picadora de carne).
Opinión – Café para los muy cafeteros (by Kdelamo).
Dicen las malas lenguas que un juego de rol no se puede llamar tal si no tiene su propia Tumba de los Horrores. Es decir: una aventura pensada para destrozar, humillar y reírse un poco de los personajes (y de los jugadores). Y por fin ha llegado.
Que si Ricard ya es poco dado a sutilezas en otros juego pues imagina si le dicen «haz lo que quieras». Pues te queda un aventura dónde la pregunta no es si vas a morir si no cuándo (o cuántas veces). Aparte de eso me encanta como Ricard introduce el sistema de tiradas pasivas para Fanhunter algo sobre lo que, supongo, sacarán un suplemento de 300 páginas.
Es posible que yo, aún versionando más la referencia del título, metiera TODO en una gran mazmorra. Ni siquiera camino ni nada: todo ahí, a saco. También, y aprovecho un chiste que luego usará Álvaro Loman (pag 85 del libro), puedes poner puntos de guardado. Total, les van a servir para poco.
Cosicas rarunas
Referencias en el título – Stranger Things.
Opinión – La demostración de lo buenas que han sido siempre las aventuras de las fans.
Álvaro, como fan que es, entiende lo que quiere el publico de Fanhunter. Primero: autorreferencias. En este caso a la aventura A cualquier cosa le llamean jamón del suplemento BCN Tales o a la clásica Operation Anhiilate. Y ya después malos de opereta, piñatas enormes a las que poder disparar todo lo que tengas, malos clásicos con pedigrí, persecuciones… Aparte de eso, y sin saber cuántos chistes ha añadido Chema al revisar, es la aventura con más gags por página, algo que es muy de agradecer . Y el uso del verbo pergeñar le da un punch.
Una historia perfecta para poner en bucle la versión que en La Resistencia hicieron de Neverending Story. Ni siquiera sólo la letra, el video puesto proyectado en la pared. Coge tu bicicleta para ir por la montaña, con la luna de fondo. Espera. ¿Dónde está tu bicicleta?
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La abuela Ninja es de los mejores personajes del universo Fanhunter. Y ya que estamos de auto-homenajes... mete a Liquideitor (aka Fanhunter Flamenca en el nuevo básico).
Dos semanas después
Referencias en el título – 28 días después.
Opinión – Un clásico de Chema… reventarlo todo.
Me imagino a Chema, tras reescribir toda la cronología de Fanhunter, pensado… ya veréis, ya veréis os vais a cagarl. Dos semanas después es el clásico inicio in media res de lo que podría llevarte a una campaña épica para salvar el mundo. O al menos la parte dónde vives tú. Además incluye no una si no dos maneras de montarte una campana en la que, literalmente, entre de todo. Y con un extra de zombis.
Con un planteamiento sencillo, aunque sabemos que el jugador de Fanhunter puede liarse hasta para hacer un bocadillo, Chema nos hace otra excelente demostración de que en Fanhunter entra todo. Y si no… es que no le has dado suficientes golpes. Y además Chema añade unas reglas para combates en el cielo.
La gracia ya está escrita pero esta puede ser la aventura para realizarla. LLeva a Fanhunter a otro nivel. ¿Quieres fantasía medieval? Pues un haz de Pichurrina hace que todo sea El Señor de los Tornillos. ¿Un épica aventura samurái? Los Yakuzzi te llevan a su Campeonato Esmelalda.
Conclusiones
Fanhunter es Fanhunter. Ahí lo llevas. ¿Cómo te has quedado? Años de estudio para llegar a esto. Ya me pueden dar la subvención. Pero sabes que tengo razón. Aquí hemos venido a llevar a un grupo de pringados que se ven metidos en el fin del mundo con una caja de clips y, con suerte, un poco de celo. A escuchar el soliloquio del malo de turno que nos explica que va a matar a la mitad de universo en vez de, yo que se, pedir pizza infinitas para todos. O a pegar tiros, a liarla, a susurrar «shhh, no hables mal de Don Depresor, tiene… PO-DE-RES»; a sentirnos en esa película tan molona, la que le gusta a todo el grupo, y añadirle un extra de caspa y sinsentido.
A eso hemos venido.
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