Una de las nuevas novedades que nos traen desde Eclipse editorial es el juego Cartaventuras, que en esta ocasión viene en versión Deluxe, la cual incluye el juego básico más la expansión. Además, esta versión más especial de lo normal, nos permite partidas de hasta 8 jugadores.
Un concepto diferente de juego
Cartaventuras es un juego de cartas narrativo en el que cada partida vivirás en primera persona la aventura de tu personaje. Puedes alcanzar la gloria o ser la cena del dragón. Porque en toda aventura que se precie, siempre, al final, debe haber un dragón, el cual guarda un gran tesoro.
Tú mismo podrás decidir cuando ir a enfrentarte al dragón, eso sí, más te vale ir preparado. Si fracasas, serás devorado y la partida se acabará. Sin embargo, tampoco puedes relajarte, ya que otro jugador podrá enfrentarse al dragón antes que tú y ganar la partida.
En el equilibrio entre prudencia y riesgo, esta la clave en este juego.
Pero ¿por qué decimos que es un juego narrativo? Cartaventuras no posee un tablero físico como tal, sino que irá formándose según avance del juego y mediante la colocación de las Cartas de Zona en las rondas que jueguen los jugadores.
Cada Carta de Zona tiene un texto narrativo que nos indica que escena estamos jugando, además de otros elementos.
¿Cómo se juega?
Una vez que se han repartido las Cartas de personajes y todos los elementos de inicio. Toca ir componiendo el tablero de juego, como antes comentábamos.
Los jugadores sitúan su Personaje encima de la carta de inicio y toman una Carta de Zona del color de su personaje. Tras decidir el turno, en el inicio, cada jugador, por orden, colocará la Carta de Zona respetando las flechas y resolviendo el texto de la carta.
En sucesivos turnos, los jugadores podrán mover una vez a una carta adyacente ya revelada (y resolver su texto) o robar una Carta de Zona nueva, colocarla adyacente a otra ya revelada y moverse a ella, de nuevo, resolviendo el texto de la carta.
Existen 4 tipos de Cartas de Zona:
- Región de Campaña: cartas verdes. Esta zona comprende principalmente llanuras, caminos, bosques y montañas.
- Región Marítima: cartas azules. Esta zona está vinculada a la mar y sus costas: islas, piratas, tempestades, puertos, seres acuáticos…
- Región Épica: cartas rojas. Esta es la zona épica, con vastos parajes, donde castillos, caballeros y seres fantásticos aparecen por doquier.
- Región Tenebrosa: cartas moradas. Esta zona se corresponde con ciénagas, páramos y rincones escabrosos, habitados por seres sobrenaturales y terroríficos.
¿Y cómo derroto al dragón?
Los jugadores pueden conseguir diversas armas y objetos mediante compra, intercambio o hallazgo. Estas cartas, salvo excepciones, serán de color naranja y cada jugador las pondrá bajo su carta de personaje, a la vista de todos. Representan la mochila del jugador que será de máximo 5 cartas guardadas. A la vista podrás tener un arma convencional y un arma mágica.
Las cartas de Objetos podrán usarse en cualquier momento del turno (si son aplicables) y tantas de ellas como se desee.
También hay objetos que podríamos llamar legendarios como el Mapa Completo, el Bastón Divino o la Espada Matadragones. Para poder forjar cada uno de estos objetos, deberéis tener las 2 mitades del objeto, es decir, las 2 cartas que lo conforman.
En el juego debes combatir contra enemigos y, con frecuencia, derrotarlos te permitirá obtener un arma u objeto. Todos los contrincantes, salvo el Gran Dragón, poseen un único punto de vida, con lo que basta vencerlos una vez.
Fin de la partida
Cuando consideres que estás preparado para enfrentarte al enemigo final, lo declaras al inicio de tu turno. Coges solo la carta del Gran Dragón y la colocas en un hueco adyacente al de tu personaje y según la flecha que quieras (no importa el color). Si estás rodeado por cuatro cartas no puedes enfrentarse al Dragón porque no hay un hueco donde colocar la carta.
El Gran Dragón es el único adversario al que hay que derrotar dos veces, con arma mágica y con arma no-mágica. Los combates con él son a vida o muerte y no admiten la huida. Al fin y al cabo, vencerlo supone ganar la partida.
Si pierdes, la partida continúa para el resto. La carta del Gran Dragón se queda dónde está durante el resto de la partida y los otros jugadores tendrán que llegar hasta allí para vencerlo y proceder del mismo modo que tú.