[Reseña] Starfinder, entre lo pulp y el galactic opera Sin valoraciones aún

De la mano de Devir, Paizo nos trae un juego que ha sabido combinar la ciencia ficción con uno de los sistemas más populares de los juegos de rol. Starfinder, es su propuesta para que Pathfinder funcione con los distintos géneros de la Ciencia Ficción.

 

Una buena adaptación de sus reglas con un trasfondo interesante ha sido la clave de su existo. Veámoslo en detalle

Distant Worlds

Strafinder obtiene su inspiración de distintas franquicias de ciencia ficción y space opera, desde Star Wars a Warhammer 40000. El primer acercamiento de Paizo al género de la Ciencia Ficción fue con el suplemento Distant World. En él, Golarion -mundo donde se desarrollan la mayor parte de las aventuras – formaba parte de un universo más grande.

Distant Worlds permitía visitar a otros mundos – por si Golarion resultaba pequeño – con naves espaciales que eran una mezcla de magia y tecnología. Su éxito animo a Paizo a sacar un “nuevo” sistema para un juego más centrado en la ciencia ficción, pero con una idea continuista de Pathfinder, por ello sucedió El Intervalo.

Los Mundos del Pacto

Hace tres siglos ocurrió un suceso que los eruditos llamaron El Intervalo, un desgarro en la historia del que no se tiene ningún registro. Los registros históricos empiezan con el conteo de mundos del Multiverso estallando en pánico al darse cuenta que su memoria no era fiable. Nadie sabe cómo o porque paso, solo se sabe cuándo sucedió: hace tres siglos.

Civilizaciones cayeron, algunas se adaptaron y otras prosperaron en medio del caos. Ahora, tres siglos después, El Intervalo, se ve con poco interés. Solo los criptoarqueólogos, rapiñadores y científicos tratan de encontrar y resolver los misterios de los extraños artefactos de esa época olvidada.

Algunos eruditos han descubierto extrañas “reservas” de información y conocimiento. Registros que datan de hace más de trescientos años y que pueden responder a la pregunta: ¿Por qué sucedió El Intervalo? La Sociedad Starfinder se ha propuesto encontrar, catalogar y organizar estos restos de información.

El perdido Golarion

El sistema conocido como Los Mundos del Pacto – centro del universo de Pathfinder- ha estado habitado desde decenas de miles. En su tercera orbita se puede observar un gigantesca la gigantesca Estación Absalom. Pero esa orbita antes estaba ocupada por el perdido mundo de Golarion, hogar de humanos, enanos, medianos y otras razas que aún se pueden ver la galaxia.

La mayoría de los eruditos de la Sociedad Pathfinder afirma que Golarion era sin duda el planeta más importante de todo el sistema, pero pocos pueden afirmar el porqué. En algún momento durante El Intervalo, el planeta simplemente desapareció.

Consultas a los dioses y a seres más antiguos que Los Mundos del Pacto han obtenido siempre la misma respuesta: “Golarion existe a salvo, en un aislamiento al que no se puede llegar mediante magia o ciencia”.

La propia Estación Absolom no hace más que plantear más preguntas: ¿Fue construida como un salvavidas? ¿Tuvo algo que ver en la desaparición de Golarion? ¿Simplemente fue una plataforma abandonada tras El Intervalo?

Sea como sea, la Estación Absolom ha sido reclamada por la humanidad y las razas de legado, como mundo natal, albergando a los Starfinders y como centro político y comercial de los Mundos del Pacto

Estación Absolom

Reglas ampliadas

Starfinder combina fantasía y ciencia ficción, usando las mecánicas de Pathfinder. Aunque Paizo prometió cambios y novedades en el sistema, lo cierto es Starfinder es más una adaptación – muy bien hecha – a elementos y situaciones propias de la ciencia ficción.

Razas y clases

Si bien los humanos siguen estando entre las razas principales, el resto de razas de fantasía han sido desplazadas a un segundo plano. Tras la desaparición de Golarion estas razas perdieron su planeta natal, por lo que resultan raros fuera de sus colonias.

El manual básico ofrece siete nuevas razas, que beben de todos los géneros ciencia ficción y que resultan interesantes: desde androides sintientes y liberados, a los Vesk, una belicosa raza reptiliana que se enfrentó originalmente a los Mundos del Pacto.

Las Clases también ha sufrido cambios. Si bien han cambiado de nombre, es fácil relacionarlas con sus predecesoras. Por ejemplo, Soldado se asemeja mucho al concepto de Guerrero, y Emisario guarda muchas similitudes con Bardo. Entonces, ¿dónde está la novedad? En Starfinder las clases se ven modificadas por un concepto nuevo llamado Temática. Esto quiere representar el enfoque que va a tener el personaje, añadiéndole un elemento de trasfondo.

Con esto tenemos una breve descripción del personaje juntando solo clase y temática: un Soldado Mercenario, serie un guerrero particularmente duro, un veterano de mil guerras, mientras que un Emisario Icono, representaría a diplomático particularmente famoso y carismático

Razas y clases de Starfinder

La acción

Starfinder, como juego basado en D20, está muy orientado a la acción: pelea, tiroteos, persecuciones, etc Los cambios en este aspecto han sido menores y muy sutiles, por lo un jugador de Pathfinder se sentirá cómodo con estas reglas.

El combate sigue siendo táctico y es necesario tener cuadricula una para ubicar bien la acción. Ahora se pueden realizar dos ataques con un incremento de dificultad y sin necesidad de dote. En nivel del personaje se suma al daño del arma. Y, por último, las armas y armaduras se han dividido en dos tipos: cinéticas (balas) y de energía (rayos), lo que aporta realismo y dificulta la labor a los “tanques”.

Los clásicos puntos de vida se han dividido en dos grupos. Por una parte, tenemos los Puntos de Aguante que sirven como amortiguador del daño y se recuperan más fácilmente; por otro tenemos los Puntos de Golpe, que representan la representan la robustez y la salud general.

En cuanto al resto de reglas, destacar las reglas para ambientes extremos de atmósfera, gravedad o radiación. En definitiva, un buen conjunto de reglas para ambientar la acción donde el DJ quiera.

Naves Espaciales

No sería un buen juego de ciencia ficción si no apareciera naves espaciales. El juego anima a que los jugadores tengan una en propiedad o formen parte de una tripulación. Las reglas están pulidas y sus opciones permiten pensar en ella como un personaje más. Los familiarizados con La Caravana de Regente de Jade o los Barcos de Calaveras y Grilletes no tendrán problemas en familiarizarse con sus reglas.

Como punto negativo, la necesidad de invertir px en ella – asignando puntos a habilidades necesarias para su mantenimiento o pilotaje – no termina de gustar a jugadores que gustan de afilar la ficha. Personalmente creo que esto da personalidad y conexión al grupo, haciendo a cada miembro indispensable para lograr que la nave se haga con un nombre.

Opinión

Starfinder es el mejor acercamiento al “mazmorreo” intergaláctico que puedas encontrar. Si bien no resulta del todo original, y creo que tampoco lo pretendía, familiarizarse con sus reglas es fácil y sencillo.

El juego asimétrico que propone con la nave – no nos engañemos, tarde o temprano todos los jugadores quieren una – puede resultar un quebradero de cabeza para un director de juego que quiera integrarla en sus partidas.

El juego continúa evolucionando. Libro de Mundos del Pacto, se hace un indispensable solo por el trasfondo que aporta sobre este universo. Archivo de Alienígenas 1, funciona como un compendio de monstruos y muestra cómo se han fusionado los conceptos de fantasía y ciencia ficción. Ambos amplían, de alguna manera, las razas, clases y arquetipos del juego básico. Devir ha habilitado a través de DriveThruRPG bastante material gratuito para que podáis ver el juego de primera mano. La aventura

Un gran juego que hará las delicias de aquellos fanáticos de la ciencia ficción que buscan mundos que explorar.

Si hay goblins a mi me vale
kdelamo

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