Un idiota, que se cree que anteriormente había dirigido la NASA, dándoselas de asesor laboral, irrumpe en medio de un caótico y sangriento combate entre un batallón de Marines Galácticos (ojo, no confundir con los Marines Espaciales) y los Orkos del Orden (no confundir con los Orkos del Caos) y le dice a un sargento que, según su contrato, sangrar no forma parte de sus tareas, que si lo hacen es por gusto.
Ante esto, el sargento decide acudir a sus representantes sindicales, quienes no pudieron mantener más tiempo oculta la cruda realidad de que, en ninguna parte del contrato, se cita explícitamente dicho requisito.
Por ello el Sindicato Unificado de Marines Galácticos convocó a sus afiliados, aproximadamente el 98% del total de marines, a una huelga de armas caídas hasta que no se reconociese el sangrado como parte imprescindible de las rutinas diarias del cuerpo, entre las que ya se ven incluida el recibir insultos (incluido de otros batallones como los Ángeles Sanguinarios, grupo mucho más varonil) y sufrir juanetes provocados por las botas duras del uniforme.
Debido a esa huelga, los Orkos han tomado aproximadamente el 75 % de la superficie del planeta, por lo que se vaticina una rápida extinción de la raza humana.
Un delegado del ministerio de defensa, Federico Trillado, se ha apresurado a indicar que ya se ha pedido ayuda a otras razas afines y colaboradoras de la humana, como son los Youtubers Silvanos y los Bajitos Barbudos.
Desde el mundo War MC Hammer, para El Cornetín, el reportero LiMaX, despidiéndose de la familia.
Nota: Este artículo es de ficción, y se realiza como complemento de la tira de ayer, día 16 de enero del 2017, de HTZ, el webcómic de humor y disparos imposibles de Koopa, que podéis ver AQUÍ.
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